De momento, parece que los planes incluyen aumentar el número de personas que podrán cobijarse en las ayudas gubernamentales e institucionales y encontrar nuevas soluciones asequibles al reajuste de tipos de interés que se avecina durante los próximos meses.
Cerca de dos millones de ciudadanos en EE.UU. tienen una hipoteca de alto riesgo que debe ajustarse a finales de 2008.